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Método Esperanza. La Lectura y Escritura en la Educación Especial.

12,00

Edad/ Nivel: Profesores, Padres y Educadores de niños y niñas alumnos de Educación Especial. Se elencan las características específicas de la discapacidad intelectual y de ellas se deducen las estrategias más apropiadas para la enseñanza de la lectoescritura.
Autor
José Pérez Marina
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Descripción del producto

En la obra se aplica el principio pedagógico de DECROLY, ya universalmente aceptado: «El método ha de partir del niño y adaptarse a sus características y no al contrario». Por eso se elencan las características de la discapacidad mental y de ellas se deducen las características del método más apropiado; en nuestro caso; el ESPERANZA.

Tanto su estructura como su desarrollo se han elaborado aplicando los criterios actuales sobre niveles, contenidos, objetivos operativos didácticos, programación de actividades, comportamientos, prevención o corrección de errores disléxicos y evaluaciones.

La formulación de objetivos operativos es recogida en el esquema y desarrollo del árbol de LE-XUAN para su más fácil utilización.

El método es de tipo ecléctico, como base silábica, y el fundamento lingüístico de esta opción se expone en capítulo aparte.

Cada nivel consta de varias unidades de trabajo y cada una de ellas comprende un número variable de objetivos didácticos, cuya consecución es comprobada por medio de una triple evaluación.

Para la utilización práctica del método se describen cada uno de los objetivos y actividades y se dan instrucciones didácticas para su realización, respetando siempre la libre iniciativa del profesor.

Luego se estudian los siguientes aspectos de la metodología especial: base psicológica de la lectura, vocabulario, copia y dictado, composición oral y escrita, reglas de la lectura y dos técnicas de apoyo: los juegos de lectura y las diapositivas.

Se ha procurado con interés la ejercitación intensa del alumno tanto en la percepción visual como en la discriminación visual.

Va dirigida a los alumnos de Educación Especial cuyos C.I. oscilan entre 50 y 75. Pero también puede ser utilizado por niños sin discapacidad con trastornos disléxicos leves, por los «borderlines» que encuentran dificultades en los métodos ordinarios y por alumnos del nivel preescolar que presenten inmadurez para la lectura.